jueves, 15 de marzo de 2018

LA INCREIBLE HISTORIA DE LOS EXTRATERRESTRES DE “W56”: El “UMMO” italiano silenciado durante 50 años








El ufólogo italiano Roberto Pinotti está punto de publicar un libro titulado "UFO Contacts in Italy – Volume One” que promete dar mucho que hablar. La obra recoge la amplia casuística italiana, rescatando del olvido algunos curiosos y desconocidos incidentes. Pero, sin duda, uno de los sucesos más controvertidos del citado libro será el denominado “il caso Amicizia”, protagonizado por un grupo de contactados italianos que aseguraron que, entre los años 1956 y 1957, establecieron comunicación directa con los tripulantes de los platillos volantes. Incluso se atrevieron a realizar “fotografías” del interior de una de las naves y de sus ocupantes durante uno de los encuentros.
Al parecer estos extraterrestres eran similares a los humanos y habrían construido bases subterráneas en la Tierra y, en Italia, la más importante estaría ubicada en la zona central de la península a lo largo de la costa del Adriático, no lejos de Pescara. El cónsul Alberto Perego era consciente de todo esto desde el principio. Según Pinotti en octubre de 1957, un platillo volador aterrizó en Francavillia, Italia, en la costa del Adriático. A dos de los integrantes del grupo de contacto se les permitió entrar en el OVNI y tomar fotografías. El diámetro del OVNI era de unos 24 metros, siendo la cabina de control, un habitáculo de unos 10 metros de diámetro. Ocho de estas fotografías fueron publicadas en 1958 en el libro 'Sono Extraterrestri' por el cónsul italiano Alberto Perego, que fue uno de los participantes destacados en este caso.

Una de las polémicas imágenes del interior del OVNI
Los contactados italianos obtuvieron supuestamente fotografías de los extraterrestres...





La trama del caso no tiene desperdicio. El “contacto” comenzó durante la primavera de 1956, durante una excursión a la Fortaleza Pia (que domina Ascoli) cuando Bruno Sammaciccia  Giulio y Giancarlo, que iban en busca de un “tesoro”, se toparon con dos seres de apariencia humana, aunque uno de ellos medía un metro de altura y su compañero al alrededor de tres metros. Fueron llevados a una gran base subterránea donde se encontraron con otros extraterrestres que dijeron provenir de planetas de nuestra propia Galaxia (a una distancia de cien mil años luz). En el interior de esta instalación comprobaron que había “jóvenes” alienígenas que eran educados para aprender tecnologías altamente sofisticadas y técnicas de pilotaje de naves espaciales. Después de este encuentro, se produjeron otros singulares episodios. Al grupo se unieron más personas. Al parecer, según cuenta la periodista Sabrina Pieragostini en un reporte titulado “Il 'caso Amicizia': quegli alieni che vivevano in Italia” (03/01/2013), uno de los integrantes, Gaspare de Lama había "profesores, ingenieros, trabajadores, periodistas, empleados, amas de casa, incluso (dicen ...) un futuro Premio Nobel. Los extraterrestres se autodenominaron "W56", aunque su nombre real era "Akri".

Esquema e imágenes del interior del platillo volador....






El caso se hizo público en 2007 cuando uno de los integrantes, Sammaciccia, justo antes de su muerte, le pidió a su amigo Stefano Breccia que anotara los extraordinarios eventos que había presenciado para mantener el recuerdo para siempre. "Entre nosotros no había jefes o subjefes, pero Bruno era el que mantenía el grupo un poco, también tenía un objeto implantado cerca de su oreja, como si fuera una especie de teléfono celular, con el que podía comunicarse telepáticamente". El caso está rodeado de absurdos e incoherencias difíciles de creer hasta para el más crédulo en cuestiones platillescas.

Otra de las instantáneas de la discordia






Al parecer los extraterrestres establecieron contacto con los jóvenes porque necesitan víveres (agua y comida), y debían ocultar su presencia ante los demás humanos. Por ello necesitaba que los jóvenes distrajeran a los camioneros mientras hacían desaparecer la mercancía. Gaspare de Lama afirmó que: "Más que platillos voladores, deberíamos llamarlos laboratorios voladores, cada nave espacial tiene su propia función: algunas son pequeñas y solo sirven como exploradores, hay diferentes tipos, entre otras cosas, una vez que pregunté si eran los únicos que actuaban en la Tierra, me dijeron que formaban parte de una Confederación: de todos los ovnis que se veían en nuestros cielos, solo el 5% pertenecía al W56. En las bases italianas había alrededor de 200 alienígenas. Entonces supimos que tenían bases también en Austria, Argentina, Suiza, Francia, quizás incluso en Inglaterra y Rusia, en todas partes tenían los mismos objetivos y se presentaban con los mismos nombres: Sigir, Saiù, Meredir ... "
Según de Lama: "La Tierra es un planeta que ellos llaman planeta-madre porque es uno de los 50-60 planetas en nuestra galaxia que tienen vida, es decir, tienen al hombre. El W56 dijo que en la Tierra había habido seis civilizaciones diferentes que se autodestruyeron, debido a guerras o desastres ecológicos. La última de estas civilizaciones ya conocía el vuelo espacial, mejor que el actual, y una pequeña parte pudo salvarse viajando a otro planeta. A través de los milenios han evolucionado, han crecido en altura, debido a la fuerza de la gravedad, o porque la evolución espiritual también conduce a un cierto gigantismo - dijeron. El hecho es que algunos de ellos han evolucionado y han sido bienvenidos en la Confederación Galáctica. Son los que hemos llamado W56: son ambos terrestres y extraterrestres, porque se mezclaron "

Una de las supuestas fotografías OVNI que avalarían el contacto 
Los investigadores italianos creen que el caso esta avalado por suficientes pruebas






Lo más increíble de esta historia, digna de una novela de ciencia ficción es que los contactos acabaron cuando otra civilización extraterrestre, denominados "I Contrari" o CTR, vencieron a los W56 y abandonaron sus bases italianas. Esto ocurrió, según de Lama, en el año 1978 coincidiendo con una oleada OVNI en Italia...
Un supuestísimo affaire que nada tiene que envidiar a la de nuestros ummitas…













JOSE ANTONIO CARAV@CA



Prohibido la reproducción total o parcial del material incluido en el presente blog sin previa autorización del autor . Propiedad de José Antonio Caravaca.

2 comentarios:

  1. Un saludo José Antonio y de nuevo muchas felicitaciones por tu descollante carrera de escritor, no hay duda de que estas entre los mejores investigadores del mundo. Bueno, en lo que respecta a este caso, es muy novelesco. Tal como lo dices en tu artículo, es digno de una novela de ciencia ficción.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Héctor... esta historia es tan fantástica como increíble... además de carecer de pruebas de peso, teniendo en cuenta lo que se narra... lo dicho, el "ummo" italiano...

    saludos amigo

    ResponderEliminar